¿Alguna vez habéis oído hablar sobre qué es la asertividad? Este es un concepto que se escucha muy a menudo, especialmente en el ámbito de las relaciones personales. Ser una persona asertiva consiste, básicamente, en tener conocimientos y herramientas para comunicarnos y relacionarnos con los demás de forma respetuosa con uno mismo y con los sentimientos del resto.
Pero y ¿qué es la asertividad en el ámbito laboral? Cuando trabajamos durante muchas horas con otras personas, que además no son de nuestra familia o círculo de confianza, es especialmente importante saber relacionarnos: poner límites, saber cómo encajar opiniones que no nos gustan y dar las nuestras sin temor a hacer daño.
Ya os hemos hablado en anteriores ocasiones sobre las aptitudes que se deben de desarrollar para ser buenos profesionales. Pues bien, la asertividad es, sin lugar a dudas, una de estas aptitudes que cualquier reclutador busca en un futuro trabajador, y que además será también enormemente útil para vosotros mismos y vuestro bienestar.
¿Os gustaría indagar más en qué es la asertividad y cuáles son los mejores ejemplos? ¿Cómo aplicar esto en el ámbito laboral para tener un buen ambiente en el trabajo? Pues de todo esto y más vamos a hablar en el post de hoy. Así que si estáis interesados… ¡Podéis seguir leyendo!
Tipos de asertividad
La asertividad es absolutamente fundamental en cualquier tipo de empresa en la que hay un equipo de trabajo. Esto hace unos años era un tema que no se trataba tanto, pero hoy en día es tan relevante que incluso existen estudios específicos para aprender a ser alguien asertivo en el trabajo y saber resolver de forma exitosa cualquier conflicto.
Ahora que ya sabéis qué es la asertividad, es importante profundizar un poco más y saber que hay diferentes tipos dentro de este concepto tan complejo. Vamos a ver algunos de ellos:
- La comunicación asertiva visual, que pone especial énfasis en mantener un contacto visual con la persona con la que estamos teniendo una conversación en el trabajo, porque esto da seguridad en uno mismo y también en los demás.
- La asertividad basada en el tono de voz, ya que este puede inducir a pensar que estamos enfadados, o bien que no lo estamos. Si lo controlamos y sabemos tener un tono moderado y confiable, toda la conversación irá muchísimo mejor.
- La comunicación asertiva expresando sentimientos, cuyo uso algunas personas pueden considerar debilidad, pero lo cierto es que establecemos con la persona que nos escucha una pequeña confianza que va a dar pie a que la conversación sea más sincera.
- Asertividad haciendo hincapié en el respeto hacia los demás, pues si continuamente hacemos ver que aunque en una conversación laboral dos personas tengan pensamientos diferentes, existe sobre todo el respeto profesional por la otra persona, todo irá mejor.
- Asertividad en la sinceridad sobre el conocimiento técnico, pues si somos expertos en el tema que se está debatiendo es importante dejarlo claro, pero también si, por el contrario, no tenemos mucho conocimiento y hacemos ver que preferimos escuchar a la otra persona.
¿Cómo potenciar la asertividad en el trabajo?
Aunque tengamos claro qué es la asertividad, a veces esto no significa saber usarla. La educación que hayáis recibido a lo largo de vuestra vida, y también la confianza en vosotros mismos, van a ser claves para conseguir ser una persona asertiva en el ámbito laboral.
Tomarse como algo personal un conflicto del día a día en el trabajo, o por el contrario, tener miedo a decir lo que verdaderamente pensamos sobre un tema en concreto, son ejemplos de lo que no hay que hacer si queréis convertiros en personas asertivas. Así pues, hay algunos puntos importantes que debéis de reflexionar cada vez que vayáis a gestionar algún conflicto laboral:
- Es fundamental observarnos a nosotros mismos a la hora de debatir. Solamente así sabremos cuáles son nuestros puntos débiles y fuertes y podremos mejorar.
- Nunca hay que tener miedo a rectificar, y esto es importantísimo alrededor de la asertividad. Aunque hayamos defendido a capa y espada algo, si resulta ser erróneo, hay que decirlo con seguridad.
- En la asertividad en el ámbito laboral nunca hay que tomarse un conflicto a lo personal. Parte básica de qué es la asertividad es saber mantener la serenidad y no sentirse dolido ni hacer daño en una discusión.
Ejemplos de asertividad laboral
Ahora que tenemos claro lo que es la asertividad, y como podemos potenciarla para que sea útil en nuestro trabajo, quizás os sea útil conocer algunos ejemplos específicos de cómo ser asertivo y lograr tener buenas relaciones profesionales. ¿Os gustaría saber algunos ejemplos de cómo aplicar la asertividad? ¡Pues vamos a verlos!
Un buen ejemplo de asertividad laboral viene cuando tenemos que comunicar algo negativo a otra persona, o bien tenemos que pedirle que trabaje de forma extra en algo específico. En vez de decir simplemente: Hoy nos ha llegado esto nuevo y vas a tener que quedarte más horas trabajando para terminarlo, será mejor decir: Sé que eres una persona que da lo mejor de sí, que se esfuerza continuamente y siempre hace más de lo que se exige, pero hoy tenemos esta situación específica, y vamos a tener que quedarnos más horas trabajando.
Otro ejemplo vendría a la hora de tener que comunicar a algún compañero de trabajo que no nos ha gustado su propuesta de proyecto. Siendo personas no asertivas, podríamos mentirle y decirle que sí nos ha gustado, aunque esto sea perjudicial para él. También podríamos decirle que simplemente es una propuesta mala y sin valor. Pero la opción asertiva e ideal sería decirle que aunque la propuesta es muy buena y se nota el esfuerzo depositado en ella, no es adecuada para este proyecto específico.
En definitiva, esperamos haber dejado claro qué es la asertividad y cómo de importante es aplicarla. No hay nada peor que tener un mal ambiente laboral, y saber comunicar nuestros pensamientos y sensaciones con los compañeros de trabajo es fundamental para no llegar a ese punto.
Si queréis más información sobre esta tema, o sobre otros, podéis escribirnos siempre que lo necesitéis a través del formulario de contacto. ¡Gracias por leernos!