Es probable que vuestras primeras versiones del currículum estuviesen ordenadas de forma cronológica, pero hoy os queremos hablar de algo que vais a tener que aprender con el tiempo, y es cómo hacer un currículum cronológico inverso.
Numerosos estudios sobre los recursos humanos y la selección de artículos nos muestran que una de las primeras cosas en las que un reclutador se fija es en la última experiencia laboral del candidato. Así pues, es lógico pensar que este dato tiene que estar muy a la vista. ¿Cómo puede ser eso? ¡Pues poniendo nuestros datos sobre experiencias laborales y formación académica ordenados desde los más recientes hasta los más antiguos!
Así pues, si estáis buscando un ejemplo de cómo hacer el currículum ordenado desde el presente hasta el pasado, habéis llegado al sitio correcto: vamos a daros las claves para hacerlo, explicaros más allá de lo lógico que es estructurar el cv así y además os vamos a enseñar un ejemplo de currículum cronológico inverso que os ayude para poder hacerlo literalmente con la ayuda de nuestra plantilla.
¡Si estáis interesados, continuad leyendo el post!
Ventajas de esta estructuración del cv
¿Habéis podido ver lo que facilita visualmente la lectura un currículo cronológico inverso? ¡Pues eso mismo es lo que piensan los reclutadores! Aunque si sienten interés por vuestro perfil, es probable que lean todos los datos que deis en el documento, lo cierto es que lo más interesante es saber lo último que habéis estado haciendo.
Si queréis saber la razón por la cual las empresas se interesan por vuestras últimas experiencias laborales y formativas, esta es bastante sencilla: normalmente las personas tienden a evolucionar, y si lo último que habéis estudiado es un máster, se presupone que antes de ello fue la carrera universitaria. De la misma forma sucede en el ámbito profesional, donde si habéis conseguido trabajar en una gran empresa, se puede entender que antes fue vuestra experiencia más inexperta en un lugar más pequeño, o con un puesto de trabajo de menor rango.
Y además de esto… ¿Quéreis saber otras ventajas de hacer el curriculum vitae cronológicamente inverso? ¡Vamos a ver cuáles son!:
- Es, como hemos dicho, la mejor forma para destacar la experiencia más llamativa que hayáis tenido en el ámbito laboral. De la misma forma, es básicamente el dato que andan buscando los reclutadores, así que el currículum cronológico inverso les dará las claves para encontrarlo rápido.
- Este tipo de currículo ayuda a disimular los periodos de inactividad en el pasado, aunque el currículum por competencias es el que más cubre esto. No es que esté mal que hayamos estado tiempo sin trabajar, pero de esta forma los reclutadores podrán ver de forma directa vuestra última experiencia sin recaer tanto en el tiempo que tardásteis en encontrar dicho trabajo, por ejemplo.
- Muestra de forma muy clara visualmente cómo ha sido vuestra especialización en algo: quizás los primeros trabajos eran más generales, pero a medida que el tiempo pasa os habéis ido introduciendo en un nicho específico, que probablemente es al que pertenece el nuevo trabajo que buscáis. Por ello, de esta forma, la empresa podrá ver los trabajos más relacionados con su área y no fijarse tanto en los que han sido de otras temáticas.
- Dentro del apartado de la formación académica, los primeros datos suelen ser los menos interesantes, como por ejemplo la educación primaria. A medida que nos hacemos mayores alcanzamos las cotas de nuestra formación, y por ello es interesante que sea lo primero que vean los que lo leen.
¿Cuando puede no ser útil el cv cronológico inverso?
Si nos dan a elegir entre hacer el currículum cronológico o bien cronológico inverso, nosotros os recomendaríamos sin dudas el segundo. Es, por experiencia y según muchos de los estudios que realizan anualmente plataformas como Linkedin, el que prefieren las empresas porque muestra de forma más transparente cuál ha sido la ascensión profesional del candidato.
Sin embargo, puede haber situaciones concretas en las cuáles a la hora de hacer el currículum no os convenga escoger este tipo de formato. Esta situación es, ni más ni menos, que la de una persona que tiene poca experiencia profesional, o bien ninguna porque acaba de terminar de estudiar o es joven. En este caso, ni el cv cronológico ni el inverso van a facilitar llamar la atención de los reclutadores, y lo más conveniente será hacer un cv por competencias en el que se puedan comprender las capacidades de la persona, más allá de su bagaje.
Tampoco convendría en caso de que hubiésemos tenido un trabajo muy bueno en el pasado, pero en la actualidad hayamos tenido que bajar en el escalafón por circunstancias muy concretas, por ejemplo, por tener menos disponibilidad temporal al haber tenido hijos, o al tener que estudiar a la vez. En ese caso, si tenéis una experiencia laboral muy llamativa en el pasado, conviene que la resaltéis en comparación con la que hayáis tenido últimamente.
Por último, tampoco va a ser útil el currículum cronológico inverso en el caso de que vuestra última experiencia laboral sea en otro ámbito profesional al que tiene la oferta. Si, por ejemplo, lleváis mucho tiempo trabajando en un restaurante o en una tienda, pero lo que buscáis es un trabajo relacionado con vuestra carrera, de abogado, como es el caso del ejemplo que os hemos dado, lo mejor será que habléis más de vuestra formación, de vuestras competencias o de las experiencias que hayáis tenido antaño dentro del ámbito de la abogacía.
Y con esto hemos llegado al final del post, donde esperamos que hayáis entendido cómo queda de forma visual el cv cronológico inverso mediante nuestro ejemplo, cuáles son sus ventajas y en caso es mejor usar otro tipo de currículum.
¡Muchas gracias por leernos siempre, nos vemos en el próximo post!